Primeramente. Llegamos, teniendo una reserva, como a las 21:00 ( habitación 48). La habitación parecía un horno. Tenía la calefacción al máximo. Por el ruido de los autos no habríamos la “ventanita “ y se pasó una mala noche con el calor que mantuvo la habitación ( no tenía aire acondicionado). Otra cosa, era una habitación para dos personas/ dos camas. Estaban los vasos pero no las botellas de agua. Al pedirlas en la recepción, me dijeron “exactamente “ que solo era “ una botella” por habitación. Pero al decirles que la lógica era dos personas = 2 botellas. Pero ganó la lógica del hotel que solo correspondía una botella por cada dos personas. Ni el hotel más “ rasca de Chile “ tiene la política de compartir una simple botella de agua pequeña, entre dos. La taza del WC no estaba limpia ( manchas de orina) lo que se le comunicó a la persona de la recepción. Para rematar, una noche empezó a filtr**** agua desde el techo (como en tres puntos), uno de ellos caía en una de las camas. Al comunicarlo a recepción, hicieron el comentario “ha, la habitación 48). El problema de filtración venía de antes y no lo habían solucionado. Al final del día vimos que repararon ( nuevamente, la filtración. La ubicación del hotel excelente, pero la experiencia no fue agradable. Por el precio que se paga, no es para nada lo que uno espera. Ni siquiera les da para “una botella, más, de agua pequeña”. Luego de tres dias nos cambiamos al hotel Costa Australis, que también está en la costanera a unos metros de este. En Costa Australis se recibe lo que uno espera. Lamentablemente NOI INDIGO de Natales no es un hotel que recomendaría.
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